Fertilizantes para frijoles: mejore su producción

Las alubias son una legumbre que tiene varios cultivos en todo el país, además de formar parte de la dieta diaria de muchos brasileños. La alubia carioca es la más cultivada y consumida a nivel nacional y Brasil es el mayor productor del mundo.

Además, tiene un ciclo de plantación corto, de 75 a 95 días, adquiere rápidamente las técnicas de cultivo, absorbe bien los nutrientes y es la más plantada en Minas Gerais, Bahía y Paraná.

La fertilización y el uso de abonos contribuyen eficazmente a la gestión de las habas, que producen un buen grano y van directamente a la mesa del consumidor.

¿Por qué es esencial la fertilización en el cultivo de frijoles?

El uso de fertilizantes en las judías favorece el crecimiento de las plantas, la correcta absorción de nutrientes y micronutrientes, además de prevenir su carencia y hacerlas así más resistentes a plagas y enfermedades.

Descubra cómo actúa cada nutriente en la legumbre

La correcta aplicación de fertilizantes ricos en nutrientes contribuye a mejorar su producción, acelera la cosecha y favorece una gestión sana de los cultivos.

Nitrógeno (N)

Es absorbido por el 50% del cultivo y distribuido al grano. Contribuye directamente al desarrollo vegetativo en las primeras fases de la planta. Además del nitrógeno, el abono debe incluir urea y amonio.

Fósforo (P)

Es responsable de la formación de raíces y de la energía celular, que desarrolla el sistema radicular, las vainas y la formación de flores. Se recomienda utilizar fósforo rico en superfosfato y fosfato diamónico, que puede aplicarse cerca del momento de la siembra.

Potasio (K)

El potasio es una fuente de resistencia y calidad del grano, y evita que las judías contraigan enfermedades o plagas durante la siembra. El uso de cloruro o sulfato de potasio durante la floración y al inicio de la formación de la vaina le proporcionará unos resultados óptimos.

Azufre

Se deben aplicar 20 kg/ha de azufre al suelo de la planta de judía. Se trata de una cantidad elevada porque la planta necesita este nutriente para aumentar su desarrollo y la fijación de oxígeno.

Micronutrientes

A diferencia de los macronutrientes, desempeñan un papel menor en la fertilización, pero siguen siendo esenciales, ya que complementan a las vitaminas y los minerales.

Zinc

Ayuda al desarrollo de las plantas y las judías, favorece la síntesis de proteínas, la respiración celular y la producción de hormonas y energía.

Molibdeno

Importante para el crecimiento de las plantas, influye en la fijación del nitrógeno y en el metabolismo, así como en las funciones respiratorias.

Tipos de fertilizantes para plantar frijoles

El primer paso es realizar un análisis del suelo para poder ajustar la cantidad de nutrientes que necesita la planta de judía. Vigila siempre los niveles de humedad y aplica el abono de manera uniforme, sin que entre en contacto con la planta, para evitar quemaduras.

Tras estos pasos, es hora de llevar a cabo el proceso de fertilización que mejor se adapte a tu cultivo de judías.

Abonado de fondo

Se trata de la aplicación de fertilizantes directamente al suelo antes o durante el proceso de plantación. Este aporta los nutrientes que son difíciles de movilizar en el suelo, como el potasio y el fósforo, y también incluye una parte de nitrógeno, por lo que se desarrolla:

• Estimulación de las raíces;
• Absorción de agua y nutrientes;
• Resistencia a las enfermedades;
• Aumento de la producción de fruta.
  

Abonado de cobertera

Complemento del abonado de base, se realiza después de la siembra con aplicaciones durante el ciclo del cultivo. También garantiza:

• Suministro continuo de nutrientes;
• Aumento de la eficacia de los fertilizantes;
• Ajuste del abono según las necesidades del cultivo y las condiciones del suelo;
• Crecimiento de las plantas.

Abonado en grano

Puede utilizarse para fertilizar judías o cualquier otro tipo de grano, como maíz, soja y trigo. El objetivo es aumentar la productividad, el consumo de nutrientes y generar un buen desarrollo del grano:

• Mejorar la calidad del grano;
• Aumentar el rendimiento de los cultivos;
• Aumentar el peso y el número de granos por vaina.

¿Cuál es el mejor abono para los frijoles?

Los productos de ICL, como el Mini Polisulfato Granulado y el Polisulfato Granulado, conocido internacionalmente como Polisulfato.

Tiene una composición equilibrada con nutrientes esenciales como el potasio y el azufre que desarrollan granos sanos durante todo el proceso de crecimiento, haciendo que la planta sea robusta, resistente y mejorando los rendimientos.

Además de estos macronutrientes, también se deriva del mineral natural Polihalita, extraído, triturado y tamizado en la mina de Boulby, North Yorkshire y distribuido por todo el mundo.

Se trata, por tanto, de un abono excelente para los cultivadores de judías que buscan un fertilizante más sostenible que contribuya a aumentar la fertilidad del suelo y el rendimiento de los cultivos.