Fertilizantes para Soya Consejos de nutrición para cultivos

Requerimientos nutrimentales 

Requerimientos en climas templados, Mollisols, EUA

Fuente: Bender et al., 2015, USA. Promedio de 3 variedades y rendimiento de aproximadamente 4 toneladas/hectárea (60 barriles/A). 

Dinámica de absorción de nutrientes durante una temporada de cultivo de soya

La soya se cultiva en la mayor variedad de tipos de suelo en el mundo, Por ejemplo desde Molisoles y Alfisoles (neutral a alcalino, con alta fertilidad) a Oxisoles y Ultisoles (ácidos, con baja fertilidad). Es importante gestionar correctamente el nivel de fertilidad del suelo para alcanzar una buena utilidad para el productor. 

La salida de nutrientes es muy similar en diferentes regiones, excepto por P, que es más alto en granos de suelos más ricos. 

Dinámica de absorción de nutrientes

• Incremento en la absorción durante el desarrollo de vainas y granos
• N, P, Ca y Mg – 50-55% de la absorción hasta R4; 45-50% después)
• S – 45% hasta R4 (55% después)
• K – 50% hasta R2 (50% después)
• Posible mayor respuesta a la fertilización dividida en suelos arenosos (especialmente para K y S)

Fuente: Bender et al., 2015, USA. Promedio de 3 variedades y rendimiento de aproximadamente 4 toneladas/hectárea (60 barriles/A). 

Rol de los nutrientes

Nitrógeno

Es el nutriente más importante para los cultivos de soya y el que se necesita en mayor cantidad. Se necesita 80 Kg de N para producir 1000 kg de soya.

• La mayor parte de los requerimientos de N son cubiertos por el Nitrógeno del aires a través de la fijación simbiótica de la bacteria Rhizobium en los nódulos de las raíces de las plantas. 

Fósforo

Tiene una función relacionada al almacenamiento de energía de la planta.

Es esencial en la absorción de nutrientes a partir de la fotosíntesis y por su rol en la construcción de compuestos orgánicos de alto valor energético, que en el caso de la soya significa “aceite”.

Deficiencias nutrimentales

Fuentes: Embrapa, Brazil; IPNI; IPI

Aspectos clave en nutrición y fertilización de soya

La soya requiere una buena nutrición para su desarrollo y crecimiento – la falta de disponibilidad de nutrientes se refleja en un crecimiento anormal o sub-normal. Las plantas muestran claramente los síntomas de deficiencia.

La soya es un cultivo alto en proteína con alto requerimiento de (N) para poder sintetizar aminoácidos y proteínas (@ 80 kg N/t granos). La principal fuente de N del cultivo es la fijación biológica de Nitrógeno (BNF, por sus siglas en inglés), una conversión de N2 a Amonio (NH4 +) que sucede en los nódulos de la raíz.

Para mejorar el BNF y evitar la necesidad de aplicar fertilizante nitrogenado, el agricultor debe hacer una inoculación con Bradyrhizobium. (mínimo 1.2 millón de células viables por semilla).

El pH ideal en la tierra es de 5.5-7.0. Debe hacerse encalado para elevar el pH de los suelos ácidos. por encima de 5.5, proporcionando Ca y Mg, neutralizando Al, e incrementando la eficiencia de la fertilización y el BNF.

El sistema de raíces de la soya necesita un buen nivel de Calcio en el suelo y tiene poca tolerancia a altas concentraciones de Aluminio. Para reducir o eliminar la toxicidad por Ale incrementar Ca en capas más profundas a 20 cm se debe usar yeso (CaSO 4 ) o fertilizantes que lo contengan.

P y K deben estar suficientemente presentes en la tierra.

En general, el nivel de P en la tierra se tiene que mantener en 20 mg/dm3 o más. En suelos ligeramente ácidos o alcalinos, donde los extractores de P más usados son Bray-1 y Olsen, las tasas de P2O5 varían entre 20 y 90 kg/ha. Por otra parte, en suelos más ácidos y con mayor capacidad de fijación de P por Hierro y óxidos de aluminio, el principal extractor es Mehlich-1, y las dosis de nutrientes son más altas, por lo menos 60 kg/ha de P2O5, alcanzando más de 150 kg/ha; en estos casos, se recomienda aplicar una parte antes de plantar (como correctivo) y el resto durante la siembra. Se debe utilizar fertilizantes hidrosolubles para mantener el rendimiento del cultivo, y las principales fuentes son superfosfatos simples (SSP), superfosfatos triples (TSP) y MAP.

El nivel de K debe estar por encima de 120 mg/dm3. La principal fuente es KCL, pero hay algunas fuentes alternativas para aportar K y otros macronutrientes (como por ejemplo la Polihalita que aporta K, Ca, Mg y S). Las cantidades varían dependiendo del la cantidad de K en el suelo, desde 50 kg/ha hasta 120 kg/ha de K2O.

En areas donde no se aplicó yeso para reducir la toxicidad por Al, debe aplicarse Azufre junto a la fertilización PK. En Oxisoles y Ultisoles la dosis sugerida va de 3 a 5 kg por tonelada de grano producido. En Molisoles y Alfisoles, que generalmente no tienen respuesta económica en el suelo y con alto contenido de materia orgánica, ligeramente ácidos a alcalinos, sin embargo, se sugiere aplicar los nutrientes en campos con historia de baja productividad para cultivos como alfalfa y maíz, en dosis de 10-15 kg/ha de S.

Ca y Mg normalmente se aportan por medio de encalado. Sin embargo, en Oxisoles con un bajo CTC, la aplicación de estos nutrientes en forma hidrosoluble por medio de la irrigación ha dado resultados positivos. La sugerencia sería aportar 15-20 kg/ha de Ca y 5-10 kg/ha de Mg.

La presencia de micronutrientes en la fertilización es importante, incluyendo Mo y Co para apoyar la fijación biológica de Nitrógeno. En Oxisoles y Ultisoles ácidos las principales deficiencias son Boro (B), Cobre (Cu), Molibdeno (Mo), Manganeso (Mn) y Zinc (Zn), y la forma de aplicación puede ser a la semilla, a la tierra o foliar. En suelos alcalinos, las principales deficiencias son Hierro (Fe), Manganeso (Mn) y Zinc (Zn).