¿Cómo se nutre el cultivo de piña para logar mayor rendimiento y calidad?
La piña (Ananas comosus) es una planta tropical con fisiología CAM, caracterizada por su metabolismo eficiente en condiciones de alta radiación y humedad limitada.
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La piña (Ananas comosus) es una planta tropical con fisiología CAM, caracterizada por su metabolismo eficiente en condiciones de alta radiación y humedad limitada. Esta particularidad, junto con su sistema radicular frágil y suculento, exige un manejo nutricional muy preciso para alcanzar altos rendimientos y frutos de excelente calidad.
- La piña presenta demandas nutricionales más elevadas que muchos otros cultivos, aunque solo una fracción mínima de los nutrientes absorbidos termina almacenada en los frutos.
- La principal vía de aporte de nutrientes en este cultivo es mediante aplicaciones foliares específicas, que permiten una absorción rápida y focalizada.
- Durante la etapa vegetativa se lleva a cabo la mayor parte de la absorción de minerales, mientras que en la fase de llenado de fruto se intensifica el suministro de potasio, calcio y magnesio para apoyar el desarrollo y calidad del fruto.
- Comprender cómo se distribuyen y almacenan los nutrientes en las distintas partes de la planta es esencial para un diagnóstico preciso y una gestión eficiente del programa de fertilización.
- El aprovechamiento efectivo de los nutrientes y el mantenimiento de un estado nutricional óptimo son claves para el rendimiento: una planta bien nutrida produce frutos de mayor tamaño y con mejores características comerciales.

Figura 1. Ciclo del cultivo de la piña
Nutrición del cultivo de la piña
La nutrición de la piña es un manejo estratégico que integra aplicaciones foliares con altos volúmenes de agua, con el escurrimiento favorecemos la absorción por raíces adventicias y verdaderas aprovechando la fisiología de la planta.
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Aplicaciones Foliares
En el cultivo de piña, el término “nutrición foliar” puede inducir a error. Lo correcto es hablar de aplicaciones foliares, ya que la piña es una planta con metabolismo CAM (Metabolismo Ácido de las Crasuláceas), lo cual significa que tiene:
- Cutícula gruesa y baja densidad estomática, dificultando la absorción directa de nutrientes por las hojas.
- Una fisiología adaptada al ahorro de agua, lo que reduce la eficiencia de absorción foliar.

Figura 2: Aplicación foliar por Spray bum
Por esta razón, las aplicaciones se hacen con altos volúmenes de agua, buscando que la solución nutritiva resbale por las hojas y se acumule en la roseta central, desde donde puede ser absorbida por raíces adventicias internas.
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Importancia de las Raíces (Adventicias y Verdaderas)
La arquitectura radicular de la piña se compone de:
- Raíces verdaderas: emergen desde la base del tallo hacia el suelo.
- Raíces adventicias o axilares: se desarrollan a partir de las hojas internas y son las primeras en activarse tras la siembra.

Figura 3. Sistema radicular de la piña
Estudios y experiencias en campo demuestran que más del 30% del fertilizante aplicado foliarmente termina en el suelo, siendo absorbido sólo si el sistema radicular es eficiente. Por tanto, es clave estimular el desarrollo de raíces con:
- Fósforo (P): esencial en la formación de raíces nuevas.
- Zinc (Zn) y Boro (B): implicados en el crecimiento de tejidos.
- Calcio (Ca) y Magnesio (Mg): fortalecen paredes celulares y tejidos conductores.
- Extractos de algas y aminoácidos: promueven la formación radicular activa y mejoran la absorción de nutrientes.
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Nutrientes Clave para la Fotosíntesis y el Metabolismo
La fotosíntesis es el proceso básico para la producción de carbohidratos, y su eficiencia depende de varios nutrientes:
- Nitrógeno (N): esencial para la síntesis de clorofila.
- Magnesio (Mg): componente central de la molécula de clorofila, favorece el transporte de los carbohidratos hacia los órganos de almacenamiento (fruto), contribuyendo al aumento de grados Brix, sabor y peso del fruto.
- Hierro (Fe), Manganeso (Mn) y Cobre (Cu): catalizadores enzimáticos del ciclo de Calvin y transporte electrónico.
- Azufre (S): involucrado en aminoácidos y proteínas clave.
La deficiencia de cualquiera de estos elementos limita la actividad fotosintética, afectando crecimiento, acumulación de reservas y formación de fruto.
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Nutrientes Clave para la Floración y Cuaje
La etapa reproductiva de la piña demanda una nutrición específica para garantizar una floración uniforme y un buen cuaje de frutos:
- Fósforo (P): estimula la formación floral.
- Boro (B): fundamental en el desarrollo de órganos reproductivos y transporte de azúcares.
- Calcio (Ca): fortalece tejidos florales y reduce aborto floral.
- Zinc (Zn): participa en la división celular y crecimiento inicial del ovario.

Figura 4. Desarrollo de la floración y fruto
Una buena disponibilidad de estos nutrientes permite un cuaje eficaz y reduce la incidencia de frutos mal formados.
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Nutrientes Clave para la Calidad y Sabor
La calidad del fruto de la piña está determinada por su firmeza, contenido de azúcares, acidez y resistencia al transporte. Los nutrientes clave son:
- Potasio (K): mejora el transporte de azúcares, firmeza y contenido de vitamina C.
- Calcio (Ca): reduce la traslucidez del fruto y mejora su vida de anaquel.
- Magnesio (Mg): contribuye al metabolismo de carbohidratos.
- Hierro (Fe) y Zinc (Zn): mejoran el contenido nutricional y sabor.
Un adecuado balance entre nitrógeno y potasio es esencial para evitar frutos acuosos, traslúcidos o blandos.

Figura 5: Cosecha del cultivo de la piña
- Programa de Nutrición por Etapas Fenológicas – Piña
Para lograr un cultivo sano y productivo, es clave mitigar el estrés abiótico y biótico:
- Agentes humectantes: mejoran la eficiencia del riego y distribución de fertilizantes, una solución eficiente es H2Flo® de ICL, diseñado para ahorrar agua y mejorar rendimientos. H2Flo reduce la tensión superficial del agua de irrigación, para que pueda penetrar el suelo al esparcirse a lo largo de las partículas del suelo, aumentando el bulbo de humedad por más tiempo.
- Extractos de algas marinas: promueven el crecimiento radicular y reducen el estrés por calor o sequía.
- Aminoácidos (glutámico, glicina, prolina): actúan como osmoprotectores y mejoran la eficiencia metabólica.
- Fitorreguladores (citocininas naturales): previenen la floración espontánea y mejoran la distribución hormonal.
- Ácidos húmicos y fúlvicos: mejoran la estructura del suelo, la retención de agua y la disponibilidad de nutrientes.
Integrar estas herramientas a un buen programa de nutrición permite maximizar el potencial del cultivo de piña, aumentar el rendimiento, mejorar la calidad del fruto y asegurar su sostenibilidad a largo plazo.
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Soluciones Eficientes para el Cultivo de Piña: Tecnología ICL
Fertilización de Base
- Polysulphate®: Fertilizante natural 4 en 1 que aporta potasio, calcio, magnesio y azufre de forma gradual y eficiente. Ideal para aplicaciones de base.
- Agrocote®: Fertilizante de liberación controlada que libera nutrientes según la temperatura del suelo y suministra de manera eficiente los nutrientes al cultivo durante todo su ciclo de desarrollo.
Aplicaciones tipo Drench o Foliares
- Línea Nova®: Soluciones solubles de alta eficiencia como:
- Nova Calcium, Nova Potassium, Nova HiPeak, Nova Mag-N, Nova Ferti-K, Nova PeKacid. Ideales para fertirriego o drench.
- Agrolution pHLow®: Fertilizantes con efecto acidificante que mejoran la solubilidad y absorción en suelos alcalinos o con aguas duras.
- Nutrivant®: Fertilizantes foliares con tecnología Fertivant® para prolongar la absorción hasta por 15 días.
- Nutrivant Booster 8-16-39 + Micros: Ideal en llenado de fruto.
- Nutrivant PeaK 0-49-32: Especializado para floración y cuaje.
Conclusión
El éxito en la nutrición del cultivo de piña no depende únicamente del tipo de fertilizante, sino de un programa adaptado a las etapas fenológicas, condiciones del suelo, calidad del agua y tipo de clima. El uso de tecnologías como fertilizantes de liberación controlada, soluciones solubles, acidificantes, bioestimulantes y agentes humectantes permite optimizar la eficiencia de absorción, mitigar el estrés y potenciar la calidad y rendimiento del cultivo.
Un análisis de suelo, agua y tejido vegetal es indispensable antes de diseñar cualquier programa nutricional. Con ello, se logra un manejo más preciso, sostenible y rentable para el cultivo de piña.