H2Gro y sustitutos de la turba

El excelente efecto de H2Gro en sustratos de turba es bien conocido sobre el terreno. En respuesta a la creciente demanda de sustratos reducidos de turba con fibras de madera, se preguntó a ICL si H2Gro puede lograr un efecto igual de bueno en sustratos de fibra de madera.

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Los experimentos prácticos ya han demostrado un efecto muy bueno en una variedad de sustratos de diferente estructura. Un ensayo realizado bajo la supervisión del Dr. Lohr en la Universidad de Weihenstephan-Triesdorf (Alemania) confirmó este efecto y el efecto a largo plazo de H2Gro en sustratos con turba reducida.

En este experimento, se utilizó una mezcla de turba y fibra de madera con una proporción de 70% de turba y 30% de fibra de madera en macetas de 12 cm. El sustrato de las macetas se saturó completamente y después se secó en una cámara climática a 25°C (5% de humedad relativa). Este ciclo se repitió 10 veces. El efecto a largo plazo de H2Gro se confirmó a lo largo de los 10 ciclos de saturación.

Captación de agua en ml/maceta con H2Gro (150 ml H2Gro/m³ sustrato) a lo largo de los 10 ciclos de saturación (con secado posterior) en comparación con el control sin agente humectante.

Menor absorción de agua en comparación con los sustratos de turba

A medida que aumenta la proporción de sustitutos de turba, la absorción de agua disminuye de forma constante en comparación con los sustratos de turba pura. Por lo tanto, la estrategia de riego debe ajustarse en consecuencia y controlarse de cerca. Una aplicación de 1,5 ml de H2Gro/litro de agua de riego inmediatamente después de la instalación garantiza una buena absorción de agua y proporciona un crecimiento más uniforme de las plantas.

Los sustratos de turba también sirven como amortiguadores del agua. La rehumectación es especialmente importante cuando se utilizan sustratos sin turba. Gracias a sus características, H2Gro mejora el balance hídrico cuando se utilizan materiales sustitutos de la turba.

Los experimentos realizados en el ICL del Reino Unido demostraron claramente que una buena rehumectación es crucial para el éxito del cultivo.