Programa de fungicidas con aplicaciones de pigmentos para céspedes

El uso de pigmentos y protectores solares en la industria del césped se ha convertido en un recurso común para muchos responsables de céspedes de campos de golf y campos deportivos en Estados Unidos. Su introducción en Europa ha coincidido con la realización de estudios en múltiples centros de ambos continentes con un producto específico de Syngenta, llamado Ryder™. En este sentido hay que recordar que ICL es el distribuidor oficial en España y Portugal de los productos para áreas verdes de Syngenta y colabora en la realización de este tipo de estudios.

En un principio, el interés del uso de Ryder era por el color que daba al césped y su efecto como protector solar, aunque los nuevos estudios han destacado los beneficios que pueden ofrecer los pigmentos para céspedes en la mejora del rendimiento de los fungicidas.
Los datos de ensayos de laboratorio de Syngenta obtenidos en dos experimentos distintos indican que la adición de Ryder a los tratamientos mejora la propagación de la gota por la superficie de la hoja, lo que da lugar a una mayor cobertura de la superficie y a un incremento significativo de la absorción de ingredientes activos en las plantas.

Estos dos conceptos son interesantes, ya que tienen potencial de aportar valor a los usuarios finales que combinan productos de pigmentación con fungicidas y bioestimulantes, así como abonos foliares.
Conseguir una cobertura más extensa de la superficie de la hoja mediante gotas de productos que pueden tener un ingrediente activo por contacto es esencial para proteger la superficie de la hoja y se puede considerar una ventaja. La mayor absorción de fungicidas de tipo sistémico es un beneficio adicional cuando se considera la prevención de estructuras fúngicas internas en la planta. Además, esto permite reducir los aportes, favoreciendo la sostenibilidad. Naturalmente, el trabajo de laboratorio es muy interesante desde el punto de vista de la investigación, aunque desde el punto de vista del usuario final, los datos de los ensayos en el campo tienen más valor.
Para confirmar los hallazgos, Syngenta efectuó ensayos en Escandinavia, Irlanda, Inglaterra y Portugal.
En los centros dedicados a la supervivencia invernal del césped, mejoró la calidad y se redujeron las enfermedades en otoño e invierno. Este artículo se centra en los estudios realizados en Inglaterra (STRI) e Irlanda (ISTI) para investigar el potencial que ofrece la adición de Ryder a los programas de fungicidas en otoño.
El 22 de septiembre de 2018, se puso en marcha un ensayo en Irlanda en el Irish Sports Turf Institute (ISTI) de Wicklow y las aplicaciones se completaron el 22 de noviembre de 2018. La superficie era una combinación de la poa anual Poa annua (>85 %) y el resto compuesto por Agrostis capillaris y Festuca rubra.
Cada dos semanas y hasta el final del ensayo, se recopilaron datos de parámetros como el color, la fitotoxicidad, la calidad global del césped, el porcentaje de cobertura frente a enfermedades y el índice de vegetación de diferencia normalizada (DNVI). Este ensayo proporcionó unos resultados muy interesantes, que se corroboraron con datos del STRI.
Los resultados del ISTI indicaron que las tres aplicaciones de fungicidas combinadas con Ryder no solo incrementaron el rendimiento de los fungicidas sino que, además, mejoraron considerablemente el color y la calidad del césped a lo largo de todo el ensayo, reduciendo su estrés.

En todos los casos, el control de enfermedades con Ryder en combinación con diversos ingredientes activos dio lugar a una mayor longevidad que el programa de fungicidas por sí solo. Esta tendencia se confirmó en el STRI, donde los datos también mostraron una excelente supresión de las enfermedades.

El efecto visual residual también mejoró en ambos lugares; en las imágenes tomadas 12 semanas después de la última aplicación en Irlanda, se observaron diferencias claras entre el programa tradicional y el mismo programa con Ryder. Este elemento tiene la misma importancia para usuarios finales de lugares como Irlanda e Inglaterra, donde la recuperación y un rápido reverdecimiento en primavera son esenciales para que los responsables del césped tengan una temporada exitosa.
La estrategia de combinación de los pigmentos con un fungicida es muy frecuente hoy día en Estados Unidos, aunque esta es la primera vez que se ha probado el efecto en condiciones europeas y con programas de fungicidas en Europa.