Mantenimiento del césped: aireado y escarificado
Consejos para el aireado y el escarificado de pistas de césped y otras superficies de césped: por qué, cómo y con qué frecuencia se deben planificar estas importantes operaciones de mantenimiento.
Aireado
El aireado es una importante operación para todas las superficies de césped, aunque la frecuencia y la intensidad con las que se debe tratar un área variarán en función de diversos factores. Lo más importante es el nivel de uso al que está sometida el área, junto con el tipo de suelo que sirve de soporte. Una superficie sometida a un uso intenso y con un suelo fino predominantemente arcilloso tendrá mayor tendencia a la compactación y, por consiguiente, exigirá un régimen de aireado más intensivo y frecuente que un área sujeta a poco desgaste y que tenga un suelo ligero, arenoso y de fácil drenaje.
¿Por qué es necesario airear?
Los suelos sanos están constituidos por una mezcla de partículas sólidas, agua y aire, junto con microorganismos y materia orgánica. Empleamos el aireado para conservar la salud del suelo, manteniendo el equilibrio de aire y agua en su interior. Un suelo bien aireado absorberá el agua de la lluvia y el riego de manera eficiente. Se drenará adecuadamente y permanecerá aireado. Se trata de un factor importante, porque los microorganismos más beneficiosos son de naturaleza aerobia y necesitan oxígeno para su metabolismo. En los suelos poco aireados, los microorganismos no pueden desarrollarse con normalidad y la materia orgánica no se descompone eficazmente, de modo que se reduce el reciclaje de nutrientes esenciales.
Además, todas las plantas deben desarrollar un sistema radicular amplio para poder crecer sanas y para maximizar su resistencia en las épocas de estrés, asegurándose el acceso al agua y los nutrientes esenciales. En un suelo mal aireado, el tamaño de los poros será menor como resultado del desgaste o debido a la pérdida de estructura derivada de la compactación. Como consecuencia de ello, habrá menos espacio para el enraizamiento y tan solo un espacio limitado para el aire y el agua. Un mejor enraizamiento en un suelo bien aireado facilitará además la supervivencia de las plantas de césped en los periodos de clima cálido y seco.
Así pues, los objetivos principales del aireado son:
- Mitigar la compactación del suelo.
- Mejorar el drenaje de la superficie.
- Mejorar el aporte de aire en el suelo.
- Mejorar la estructura del suelo.
- Mejorar las condiciones para el enraizamiento.
- Potenciar la descomposición de la materia orgánica en el horizonte superior.
- Aumentar la resistencia a la sequía (indirectamente, estimulando un crecimiento más profundo de las raíces y manteniendo la superficie abierta al agua de la lluvia y el riego).
¿Qué tipos de aireado se pueden practicar?
Existen muchos tipos de aireado, pero el corte y el pinchado constituyen probablemente el grueso de la rutina de trabajos.
Los dientes de corte se pueden describir de distintas maneras dependiendo de su forma y del modo de funcionamiento: cuchilla, diamante, cincel y podadora de raíces. Los dientes se han diseñado para penetrar en la superficie y estimular el enraizamiento, maximizando a la vez el intercambio de aire y minimizando la perturbación. El corte se realiza mejor durante los periodos de otoño e invierno, dado que, si la primavera o el verano son secos, se podrían abrir unas marcas de corte.
El pinchado es la operación más indicada durante la primavera y el verano. Los dientes macizos tienen diferentes diámetros y longitudes, pero producen un agujero redondo que no se abre.
El aireado normal se debe concentrar en los 75–150 mm superiores del suelo. La selección del equipo dependerá del tamaño y la calidad del área que se va a laborar. Las áreas verdes de gran tamaño dominadas por céspedes toscos (raigrás perenne, festuca alta y poa de los prados) se tratan mejor con herramientas montadas en tractor, como aireadores de rodillo provistos de dientes macizos (pinchos) o cuchillas. Hay herramientas de este tipo para todo el abanico de tamaños de tractor, así como para otros vehículos de servicio, de modo que los trabajos se puedan realizar con la mayor eficiencia posible.
Para áreas más pequeñas, puede ser mejor opción el uso de aireadores más compactos y autopropulsados, manejados a pie, en particular para céspedes ornamentales. Estos equipos se presentan en forma rodillo que ejerce una acción de pinchado y pueden aceptar tamaños y tipos de diente muy variados (macizo o hueco, o en forma de cuchilla o de cuchara).
Para trabajos localizados, puede ser interesante utilizar herramientas manuales (por ejemplo, una horca de mano), en particular para tratar trastornos como las manchas secas, o problemas localizados de drenaje o compactación.
¿Y cuál es la utilidad de los pinchos huecos?
La aplicación de pinchos huecos es una operación más especializada que consiste en la extracción física de un tapón de suelo, o canuto, del perfil con la intención de retirar materia orgánica y suelo malo de la superficie y reducir su compactación. El tamaño de los dientes varía entre 6 mm y 25 mm de diámetro y generalmente tienen una profundidad de trabajo de 75–100 mm. Esta operación introduce un gran volumen de aire en el perfil del suelo y constituye una oportunidad para el reemplazo del suelo. Habitualmente, la operación va directamente seguida por la aplicación de una cobertera a base de arena, que se esparce en el área y se incorpora a los agujeros abiertos por los dientes.
¿Qué ocurre con la compactación profunda?
Si el suelo se ha compactado y ha empezado a presentar dificultades para el drenaje, o se ha producido una pérdida de estructura debido a que se han realizado los trabajos con el suelo mojado, se pueden lograr mejoras mediante el uso de equipos especializados. Estos útiles se han diseñado para montaje en la parte trasera de un tractor y se presentan en diversos tamaños para adaptarse a todos los lugares y condiciones del terreno. El de mayor tamaño tiene una anchura de aproximadamente 2,5 metros y una profundidad de trabajo de hasta 400 milímetros (16 pulgadas).
Las máquinas como Verti-Drain o Wiedenmann funcionan de manera similar a una horca de mano, combinando el aireado profundo del perfil del suelo con una acción motriz que provoca la fracturación y la fisuración del suelo en profundidad y descompone las capas compactadas. Otras máquinas como Shockwave y Earthquake actúan de manera diferente, pero el resultado final es el mismo. Estas máquinas están equipadas con una serie de cuchillas giratorias y vibrantes que crean ranuras lineales en profundidad, en contraste con los dientes que generan agujeros verticales individuales.
La elección del momento para ejecutar los trabajos de descompactación profunda es crucial para su éxito. El suelo debe estar húmedo para maximizar la penetración, pero lo suficientemente seco para posibilitar su fracturación y fisuración. Si se intenta descompactar un suelo cuando está mojado, el resultado será un barrizal y puede que sea más perjudicial que beneficioso. Si se requiere, el otoño es la mejor época para llevar a cabo esta operación.
Escarificado
El escarificado es un proceso diferente al aireado. Se trata fundamentalmente de una operación de cuidado del césped cuyo fin es estimular un hábito de crecimiento vertical, suprimir el deslucido crecimiento rastrero o lateral y eliminar musgos y controlar la acumulación de materia orgánica. El escarificado se puede ejecutar empleando un simple rastrillo o un escarificador de discos, o mediante equipos de escarificado especializados y altamente mecanizados provistos de una serie de cuchillas giratorias verticales. Existen unidades tanto de manejo a mano como de montaje en tractor, dependiendo del área que se desee tratar. La elección del equipo dependerá del área que se va a laborar, de la intensidad del tratamiento y de la calidad requerida del acabado.
La intensidad de una operación de escarificado quedará determinada por el alcance del problema que se ha de solucionar. Un escarificado normal solo debe raspar la superficie del suelo, eliminando musgos y materia orgánica de la base del césped. El escarificado profundo, que penetra en el horizonte superior del suelo, solo se requiere cuando se ha acumulado un exceso de materia orgánica debido a un desequilibrio en el programa de mantenimiento. Por ejemplo, el riego excesivo, el exceso de nutrientes, una aireación limitada o un mal drenaje son motivos que pueden contribuir a un problema de materia orgánica.
El escarificado puede ser muy perjudicial para el césped y solo se debe plantear en periodos de crecimiento vigoroso, como primavera y otoño. La primavera es la época para realizar trabajos de eliminación de musgos del césped y vigorizar el crecimiento. Por otro lado, los trabajos de otoño dan un gran resultado cuando se realizan como parte de un programa de renovación de final de temporada, ejecutando hasta tres o cuatro pasadas para preparar el área para la resiembra. Entre medias, estos trabajos se pueden complementar con un rastrillado ligero más frecuente. De este modo, se podrá mantener un buen nivel de presentación al realizar estas tareas en conjunción con la siega, permitiendo controlar la acumulación de materia orgánica en la base del césped y reduciendo, por tanto, la exigencia de operaciones intensas en otros momentos.
Consejos útiles para el aireado y el escarificado
- La elección del momento para ejecutar el aireado es importante. Para áreas de césped fino de alta calidad, el escarificado se debe restringir al invierno para evitar la abertura de ranuras si el clima es seco. La descompactación profunda exige que el suelo esté húmedo para su ejecución, con el fin de maximizar la penetración y, por tanto, optimizar la efectividad de la operación.
- ¡Asegúrese de que la velocidad de avance de la operación sea la adecuada para optimizar la tarea que se está realizando, y no simplemente para terminar el trabajo lo más rápido posible! Si se realiza con demasiada rapidez, la penetración será limitada y existe riesgo de «arrancar» el césped.
- El escarificado profundo es el método más efectivo para quitar materia orgánica del horizonte superior, pero la profundidad operativa se limita habitualmente a 25 mm. La profundidad de la operación se debe limitar al 75 % del espaciado de las cuchillas para evitar que se desestabilice la superficie. Si se efectúa una pasada doble, ejecute la segunda con la mitad de la profundidad de trabajo de la primera y con un ángulo no superior al 45 %.
- Cuando los suelos son densos, aplique una cobertera junto con el aireado para mejorar el drenaje de la superficie, aumentar la tolerancia al uso y diluir la materia orgánica en la base del césped. Los canutos deben tener un diámetro no inferior a 12 mm para garantizar que se puedan rellenar eficazmente.
- Escarifique solo cuando el crecimiento es intenso, para garantizar una buena recuperación. Si se realiza un único tratamiento anual, el otoño es la mejor época para hacerlo. Solo se debe realizar una escarificación en una época temprana si ya se está produciendo crecimiento (mayo) pero nunca durante las épocas cálidas/secas.
- Para lograr un mejor acabado, intente variar la dirección del escarificado y completarlo cuando el césped esté seco. No escarifique antes de levantar un césped.
- No airee ni escarifique durante los dos o tres días posteriores a la aplicación de un fertilizante, para evitar que se alteren los gránulos y se puedan dañar los productos de liberación controlada, lo que podría afectar al patrón de liberación. La aplicación de un producto convencional entre siete y diez días antes de comenzar a ejecutar los trabajos favorecerá el crecimiento y facilitará una buena recuperación.