El papel crucial de los agentes humectantes en los programas de mantenimiento

Cuando aumenta la presión en torno a los presupuestos de mantenimiento de los campos de golf o cuando se debe lidiar con climas dispares, la selección y el uso de agentes humectantes como parte de los programas de gestión integral del césped es cada vez más importante. Con las previsiones de veranos menos calurosos o secos y con más lluvias en el norte de Europa, podría pensarse que los agentes humectantes no son esenciales en estas regiones. Sin embargo, la realidad es que estos deberían seguir jugando un papel muy importante en la preparación de superficies deportivas de calidad y su gestión.

Las construcciones dominadas por la arena y el drenaje que resulta tan importante para facilitar el juego durante todo el año facilitan las condiciones para que aparezcan suelos hidrofóbicos (repelentes al agua). Además, las grandes cantidades de arena que se utilizan sobre las superficies existentes para gestionar la acumulación de materia orgánica presentan el mismo problema. Por otro lado, el recorte de agua en algunas zonas y la nueva tendencia a restringir los aportes de riego también llevan a considerar los beneficios potenciales de los agentes humectantes.

Los agentes humectantes son surfactantes, un tipo de compuesto químico diseñado para producir un cambio físico en la superficie de los líquidos. En pocas palabras: reducen la tensión superficial del agua. En la fabricación de agentes humectantes, se utilizan distintas clases de productos químicos surfactantes que producen diferentes formas de acción. En general, estas formas de acción los agrupan en agentes humectantes de «verano», utilizados fundamentalmente para la conservación del agua y para prevenir el desarrollo de manchas secas hidrofóbicas, y de «invierno», que se utilizan para aumentar el movimiento del agua, especialmente la infiltración y la penetración hacia zonas más bajas. Existen más productos especializados que también están disponibles para ayudar a la dispersión del rocío, a que el agua avance a través de sales y se las lleve (lavado de sales) y para tratar las manchas secas de forma curativa. Entender la forma de acción del agente humectante es esencial para seleccionar el producto correcto para la tarea que debemos llevar a cabo y el tipo de suelo que se vaya a tratar.

Cuándo aplicar un agente humectante

Entonces, ¿cuándo se debe aplicar un agente humectante? Todo depende de lo que usted quiera conseguir. Para la gestión del césped en un green, en el que la uniformidad del césped, la alta calidad de juego y la finura de la superficie son esenciales, se recomienda la utilización de un programa para toda la temporada que incorpore un agente humectante. Este tipo de programa optimiza el comportamiento del agente humectante, permitiendo una gestión eficaz del agua y controlando las manchas secas localizadas asociadas a una calidad del césped inconsistente. Este programa debería comenzar pronto, al inicio de la primavera con la primera aplicación en el mes de marzo. La mayoría de los productos están diseñados para utilizarse de forma preventiva mensualmente y, en general, su efecto es acumulativo. Esto significa que el nivel de agente humectante en el suelo aumenta con cada aplicación. El objetivo es maximizar los niveles de humectante al hacerlos coincidir con la temporada más calurosa y seca del año (julio/agosto), para mantener un mejor equilibrio de aire y humedad dentro del suelo y que, así, el comportamiento del suelo y la salud de la planta resulten óptimos. Como resultado, el césped se desarrollará más fuerte y sano con un sistema radicular más profundo y, de esta forma, proporcionará la mejor superficie de juego y será menos vulnerable a las enfermedades.

La utilización de un agente humectante de calidad en una estrategia programada a lo largo de la temporada proporcionará ventajas adicionales en construcciones dominadas por la arena, especialmente en la zona radicular. Estos productos mantendrán un nivel saludable de humedad en la profundidad del perfil superior, manteniendo la capa de materia orgánica más seca en la superficie pero reduciendo la lixiviación. Esto puede ser particularmente importante cuando la cobertura del suelo está restringida, especialmente en áreas con siembras recientes donde las semillas son vulnerables y susceptibles a las condiciones de calor y sequía. Además de proporcionar al césped acceso a suficiente humedad para que pueda crecer saludablemente, los ahorros económicos potenciales son significativos, especialmente cuando se depende de agua de consumo o reciclada.

Cuando los anillos de bruja son un problema constante, las aplicaciones regulares de agentes humectantes pueden ayudar a prevenir su desarrollo y reducir la intensidad de su impacto en el césped cuando se utilizan asociados a aplicaciones preventivas de fungicidas, de forma que, así, la materia orgánica se gestiona con efectividad. Los anillos de bruja de tipo 1 causan los daños más intensos al césped y, si se permite su desarrollo, terminarán matándolo, normalmente a causa de los compuestos hidrofóbicos liberados por el hongo que causa la enfermedad (basidiomicetos).

Los agentes humectantes también proporcionan mejoras significativas en la calidad del juego, para aportar a los campos la ventaja competitiva que requieren distintos deportes en estos tiempos tan convulsos para la economía. Esto se cumple especialmente en los greenes y los campos deportivos, en los que la superficie de interacción con la bola es tan importante. Cuando los niveles de humedad no son constantes, las superficies pueden desarrollar baches y ser impredecibles, con variaciones importantes del plano: una superficie donde no es agradable jugar. Un nivel más uniforme de humedad conseguido mediante aplicaciones regulares de agentes humectantes servirá para mejorar la homogeneidad del crecimiento del césped y, así, mantener una superficie más lisa, fiable y predecible para disfrute de todos los usuarios.

El uso de agentes humectantes de infiltración

Cada vez más, los responsables de céspedes buscan agentes humectantes de infiltración que se puedan utilizar durante el invierno o en temporada de lluvia. Su utilización se orienta a una gestión del agua durante todo el año que ayuda a mejorar la superficie del césped. Durante los periodos más húmedos, las superficies de césped pueden saturarse y mantenerse así en el tiempo. Esto es un problema por múltiples razones: reducción de la densidad del césped, reducción del enraizamiento, ratio de agua/aire pobre que produce condiciones del suelo anaerobias y reducción de la actividad microbiana, reducción de la descomposición de la materia orgánica, deformación en la superficie causada por el paso de personas y maquinaria, incremento de la susceptibilidad a las enfermedades e invasión por musgo.

La acción de los agentes de infiltración reduciendo la tensión superficial del agua ayuda a mejorar el movimiento del agua; se pueden utilizar para mover el exceso de agua desde la superficie del suelo hasta el interior del perfil del suelo cuando se necesita. El beneficio es aún mayor si se combinan con una aireación de la superficie y la presencia de drenaje subyacente. Su utilización regular mantiene las superficies más secas y ayuda a mantener un equilibrio más saludable de agua y aire en el perfil. Las ventajas serán un césped más fuerte y sano con un buen sistema radicular que es menos propenso a enfermedades. Otros beneficios que proporcionan son una descomposición más efectiva de la materia orgánica y una superficie más homogénea, con una buena densidad de césped y menos musgo, algas y malas hierbas.

Los agentes humectantes tampoco son una solución milagrosa que vaya a resolver todos los problemas y mejorar la calidad de juego por sí sola. Para obtener el máximo beneficio, deberían utilizarse como parte de un plan de gestión integral del césped que utilice con efectividad las aplicaciones de riego para reemplazar las pérdidas de agua por evapotranspiración. Estas pérdidas están asociadas a operaciones de aireación frecuentes a profundidades variables para mantener sano el ambiente que rodea a la raíz. Un higrómetro de buena calidad es una herramienta de gestión agronómica excelente para cualquier responsable del césped, ya que le permite monitorizar los niveles de humedad del suelo. Estos instrumentos proporcionan una visión objetiva para una ciencia que antes era difícil, y permite una estrategia mucho más enfocada a objetivos de gestión del riego y del agua, con la que ahora se puede controlar el agua hasta niveles que antes podían resultar peligrosos para la salud de la planta y con un gran énfasis en el riego manual.

Resumen 

En resumen, la gestión del agua utilizando las últimas tecnologías de agentes humectantes es una parte crucial de la estrategia integrada para la gestión de un césped de calidad. Existe una gran variedad de agentes humectantes en el mercado, por lo que es importante que conozca bien el producto que está comprando y que se asegure de que está diseñado para proporcionarle los resultados que desea. Prepárese para realizar la aplicación inicial con la antelación suficiente para optimizar las ventajas en cuanto a calidad, siguiendo el programa recomendado en la etiqueta del producto. Cuando sea posible, utilice un higrómetro como ayuda para tomar decisiones y sea flexible: no tenga miedo a hacer cambios en su programa de gestión del agua para conseguir los resultados que desea en sus superficies.