Solheim Cup 2023: La visión del Golf Course Manager de Finca Cortesin
La colaboración entre ICL y el campo de golf Finca Cortesin
A medida que se acerca la prestigiosa Solheim Cup, todos los ojos están puestos en el green, tanto literal como metafóricamente. El cuidado minucioso de los campos de golf, donde cada brizna de hierba desempeña un papel vital, es testimonio de la dedicación y la experiencia de greenkeepers como Ignacio Soto. En una entrevista exclusiva, el Sr. Soto, Golf Course Manager de Finca Cortesin, sede de la Solheim Cup en España, comparte sus ideas sobre el presente y el futuro del greenkeeping, ofreciendo una visión de los retos y cambios que se avecinan.
Un viaje a través del tiempo y del terreno
El viaje de Soto hasta su puesto actual ha sido una exploración a lo largo de toda su vida de su pasión por el golf. Con un arraigado amor por el juego desde la infancia, se licenció en agronomía en España, lo que sentó las bases para su formación especializada en gestión del césped en la Michigan State University. De vuelta a España, se sumergió en el campo, mejorando sus habilidades en campos de renombre como Valderrama y Sotogrande. Como participante activo en la comunidad de greenkeepers, Soto ha desempeñado cargos de liderazgo en asociaciones de greenkeepers.
Una fuerte conexión con la naturaleza
Para Soto, el greenkeeping es una mezcla armoniosa de dos pasiones: el golf y la naturaleza. Dice: “Un greenkeeper dedicado no sólo debe entender los matices del juego, sino también apreciar el mundo natural que forma el telón de fondo del campo. La íntima conexión tanto con el deporte como con el medio ambiente subraya el corazón del greenkeeping”.
Evolución del panorama del greenkeeping
Al comparar el pasado con el presente, Soto destaca el poder transformador de la educación y la tecnología. Hoy en día, el mantenimiento verde es diferente de lo que era en el pasado. Los avances en la educación, en particular la disponibilidad de títulos especializados y la accesibilidad de la información en línea, han dado paso a una nueva era de la jardinería”. Los greenkeepers disponen ahora de una riqueza de conocimientos con la que sus predecesores sólo podían soñar. Como señala Soto, “el énfasis ha pasado de la simple gestión del césped a convertirse en hábiles gestores de personas y recursos medioambientales”.
El greenkeeper del futuro
De cara al futuro, Soto prevé cambios significativos en el mantenimiento de los greens en las próximas dos décadas. Por ejemplo, la electrificación de la maquinaria, la aparición de nuevas variedades de césped adaptadas a diversos climas y la proliferación de herramientas orgánicas y biológicas para combatir las plagas. Y añade: “Los robots, guiados por GPS, revolucionarán el sector, aunque el toque humano y la experiencia seguirán siendo insustituibles. Me imagino que el espacio de trabajo de un jardinero en el futuro será una sala llena de pantallas; un centro de alta tecnología, que supervisará las operaciones robóticas y las condiciones ambientales”.
La sostenibilidad como valor fundamental
Para los greenkeepers, la sostenibilidad es un valor fundamental. Soto subraya que todos los greenkeepers sienten un profundo aprecio por la naturaleza y tratan de minimizar su huella ecológica. Soto: “Utilizar agua reciclada para el riego, educar al público sobre sus prácticas ecológicas y comprometerse con las comunidades locales son sólo algunas de las formas en que los greenkeepers se esfuerzan por crear un equilibrio sostenible entre las exigencias de los campos de golf y el entorno que habitan.”
Retos y oportunidades en el horizonte
En los próximos años, los greenkeepers se enfrentarán a retos y oportunidades. Un gran reto, según Soto, son los próximos cambios en la normativa sobre pesticidas y la necesidad de nuevas estrategias para mantener la calidad de los campos sin depender en gran medida de los pesticidas químicos. Hace hincapié en la importancia de la comunicación entre los campos de golf y las asociaciones para mostrar el compromiso de la industria con la sostenibilidad.
Colaboración en greenkeeping
No sólo la comunicación entre campos de golf y asociaciones, sino también la colaboración de la industria en general es crucial para afrontar los retos (de sostenibilidad), según Soto. Las empresas como ICL pueden desempeñar un papel fundamental si comprenden los retos específicos a los que se enfrentan los greenkeepers en las distintas regiones y desarrollan soluciones específicas. Estas colaboraciones pueden ayudar a los greenkeepers a mantener la calidad de los campos y, al mismo tiempo, cumplir la normativa y las prácticas sostenibles”.
Consejos de Soto para los greenkeepers
El consejo de Soto para sus colegas greenkeepers es eterno: “Una base sólida en agronomía, la voluntad de aceptar los avances tecnológicos y una pasión arraigada tanto por el golf como por la naturaleza. El reto consiste en adaptar estos principios a un campo en rápida evolución, donde la combinación de tradición e innovación define el futuro del greenkeeping”.
En vísperas de la próxima Solheim Cup, que se celebrará del 22 al 24 de septiembre, la perspicacia y dedicación de Ignacio Soto nos recuerda que el greenkeeping no es sólo una profesión, sino una interacción dinámica de ciencia, creatividad y medio ambiente. Mientras el campo de golf espera a las mejores golfistas del mundo, los trabajadores están listos entre bastidores, garantizando que cada putt y cada swing se realicen sobre un césped de la más alta calidad, nutrido por la experiencia, la dedicación y los productos de la más alta calidad.
Como orgulloso colaborador de la Solheim Cup 2023, ¡ICL desea a todas las golfistas un torneo fantástico!