Un CRF biodegradable: una gestión eficaz del nitrógeno
Un gran avance en agricultura sostenible gracias al equipo de investigación de ICL, pionero en un futuro sostenible de la fertilización
Como parte del compromiso de ICL Growing Solutions con la agricultura sostenible, nuestro equipo de I+D ha desarrollado un innovador fertilizante de liberación controlada (CRF) con un encapsulado totalmente biodegradable, denominado eqo.x. Un estudio independiente del Instituto de Gestión de Nutrientes (Países Bajos) muestra los importantes beneficios medioambientales de este innovador producto.
Se realizó un experimento en maceta con remolacha roja para evaluar la reducción de las pérdidas de N en el medio ambiente al utilizar el CRF eqo.x de ICL (es decir, urea recubierta por la tecnología de liberación biodegradable de ICL) en comparación con la urea sin recubrir.
Reducción del impacto ambiental con tecnología CRF avanzada
Nuestros resultados revelan que el uso de CRF puede reducir significativamente la pérdida de nitrógeno al medio ambiente. En comparación con el fertilizante de urea tradicional, nuestro CRF redujo el nitrógeno total lixiviado en un impresionante 58%, disminuyó la volatilización de NH3 hasta un 60% y redujo las emisiones de N2O en más de un 10%. Se trata de un gran paso adelante en la mitigación del impacto medioambiental de la fertilización nitrogenada, ya que reduce la contaminación de las aguas subterráneas debido a la lixiviación del nitrógeno y mitiga el cambio climático gracias a la reducción de los gases de efecto invernadero derivados del nitrógeno.
La exclusiva tecnología de encapsulado biodegradable eqo.x lleva a los CRF a un nuevo nivel de sostenibilidad y aplicabilidad en la explotación, ya que la cubierta del CRF se descompone de forma natural, sin dejar contaminantes en el suelo.
Mayor eficiencia y rendimiento de los cultivos
El estudio también destaca que nuestro CRF no sólo beneficia al medio ambiente, sino que también mejora el rendimiento de los cultivos y la eficiencia en el uso del nitrógeno. Con un aumento de más del 30% en el rendimiento y una mejora de más del 80% en la eficiencia del uso del nitrógeno en comparación con los tratamientos convencionales con urea, este producto marca una nueva era en la agricultura eficiente y responsable.